Todos activos

A la hora de llevar el control de una clase o grupo para realizar una actividad, es importante tener en cuenta que no todos los días todo el mundo va a estar en sus plenas facultades para realizar dicha tarea. Y esto no significa que la persona que no puede hacer lo mismo que el resto, se quede en su casa o acuda como un mero espectador.

Cuando tenemos una o varias personas que no están al 100% o que no pueden realizar actividad física, tenemos que adaptar a sus posibilidades otro tipo de tareas, siempre teniendo en cuenta que no podemos perder el ritmo de trabajo de todo el grupo para hacer esas adaptaciones. Por lo tanto, la persona que no puede dar su 100%, tendrá unas consignas distintas al resto, mientras este resto hará lo que teníamos planeado. Si el caso es el de alguien que no puede realizar ejercicio físico, esta persona tendrá que tener responsabilidades del tipo de ayuda en la organización del grupo o subgrupos en ciertas tareas; de observación y procesar la información que le llega al observar, fijándose en aspectos ya trabajados y que son importantes; etc.

Lo que quiero dar a entender es que siempre hay que buscar la forma de que nadie esté totalmente pasivo y ausente de la actividad, sino que de una forma u otra, todos deben estar participando.

Competitividad como motivación

A la hora de llevar a cabo una actividad física o deportiva con un grupo de alumnos, ya sean niños o personas de edad más avanzada, es muy importante saber captar su atención y despertar en ellos un verdadero interés de cara a la tarea o actividad que tenemos entre manos, para que la realicen con ganas, la disfruten, y a raíz de esto aprendan verdaderamente.

Como siempre voy a poner un ejemplo de una situación de este tipo que se haya dado en clase. Estábamos en las pistas de atletismo y tras haber estado aprendiendo la técnica de carrera de relevos y haberla practicado durante un rato, el profesor nos dijo que íbamos a realizar una competición. Y así fue. Hicimos un pequeño campeonato de carreras de relevos y todos pudimos ver como durante este ejercicio el interés de todos por realizar bien la técnica y el interés en general por la actividad era bastante mayor.

Pero ojo, estas tareas de competición también pueden ser a la vez desmotivantes. Es importante que a pesar de haber grupos ganadores y perdedores, no solo los ganadores avancen rondas como en una competición normal, sino tener en cuenta que todos los grupos, ganen o pierdan, tengan la misma oportunidad de participación, para lo que podemos organizar nosotros esa competición a nuestro antojo para que así sea.

Carreras: Autoevaluación

Tras haber leído los apuntes de vallas, obstáculos, relevos y fondo con atención, hemos tenido que responder una serie de tests con diferentes cuestiones. Se trataba de 3 distintos con preguntas mezcladas sobre estos ámbitos.

Durante la lectura o estudio de la información es importante hacerlo con interés y sin presión alguna aún sabiendo que te vas a enfrentar a ciertas preguntas, ya que si lo haces como una obligación simplemente vas a estar deseando acabar y obtener los resultados de esas pruebas, que por cierto serán más pobres debido a esa lectura sin interés.

Hablando de los resultados ya directamente, he observado que a estas alturas conozco mucho más de lo que sabía no solo antes de leer la información, sino que más de lo que sabía días antes de empezar este ciclo. Las distintas clases prácticas de atletismo, me han servido para que incluso inconscientemente, haya comenzado a tener bastantes conocimientos básicos sobre las técnicas, normas o bases de diferentes pruebas de carreras.

Iniciación: vayamos por partes

En esta nueva publicación, os voy a hablar de algo que podría pasar desapercibido pero que tras recalcarlo el profesor en clase y pensarlo detenidamente me parece importantísimo a la hora de hablar de aprendizaje sobre todo en fases de iniciación.

Para entrar ya en el tema os voy a poner un ejemplo:

En la piscina, estamos empezando a realizar ciertos ejercicios para ir consiguiendo una técnica correcta en los diferentes estilos de crol, espalda y braza. No voy a explicar cada estilo debido a que lo que yo quiero explicar es otra cosa, así que me centraré en el de espalda por ejemplo.

Es fácil llegar y decir, "bueno hoy vamos a aprender a nadar correctamente a espalda" y empezar a decir como debemos llevar colocado el tronco, los brazos o las piernas y ya de repente ponernos a dar largos a espalda durante todo el rato.

Nosotros lo estamos haciendo de otra forma. A nosotros nos combina ejercicios básicos que requieren diferentes tareas sencillas. Para empezar a sacar el hombro cuando tenemos que elevar el brazo a espalda, empezamos nadando hacia atrás con aletas sin ni siquiera sacar el brazo, simplemente dándole a los pies y elevando el hombro, ya que esta era nuestra misión. Posteriormente ya lo hacíamos sacando el brazo, lo que hacía que ya tuviéramos una tarea más compleja pero habiendo practicado y perfeccionado anteriormente la otra. Y con diferentes ejercicios fuimos trabajando estas dos, para después conseguir introducir otra nueva tarea para seguir trabajando el estilo de espalda.

En resumen lo que yo estoy aprendiendo es que es importante dar dosis pequeñas de información e ir trabajándolas en la práctica poco a poco y volviendo a ellas con repasos antes de introducir más y nuevas tareas e información.